MIMANDO LOS PIES

Si eres como yo (que pocas veces volteo a ver mis pies), entonces necesitas cambiar un poco ese hábito y comenzar a voltear un poco más hacia tus olvidados pies y poner atención a cómo se encuentran.

Examina tus pies todos los días  estando atento a los cambios de color y temperatura. Puedes requerir un espejo irrompible para ver la planta de los pies, y si a pesar del espejo no puedes verlos bien, pide ayuda a algún familiar o amigo.

1. Lava tus pies diariamente con agua templada y jabón neutro. Sécalos suavemente y sin frotar con una toalla limpia, especialmente entre los dedos.
2. Córtate las uñas en forma recta y lima las esquinas para suavizarlas. Hazlo después del baño, cuando aún estén blandas.
3. Usa un calzado cómodo  de piel suave y flexible y de horma y tamaño adecuado a tu pie. Recuerda que éste sigue creciendo a lo largo de los años.
4. Si eres mujer, ten en cuenta que los zapatos amplios y de tacón bajo son más cómodos y seguros que los puntiagudos y de tacón alto.
5. Usa siempre calcetines o medias y cámbialos todos los días.
6. No te pongas calzado ajustado o demasiado amplio que roce o lesione los pies.
7. Cuando compres zapatos, hazlo  por la tarde, que es el momento en que los pies están más hinchados, y si uno de ellos es más ancho que el otro, el zapato debe calzarte bien.
8. A los zapatos nuevos hay que amoldarlos poco a poco, no más de una a dos horas al día durante las primeras dos semanas.
9. Ten al menos dos pares de zapatos para que puedas alternarlos y no uses el mismo par todos los días.
10. Evita caminar descalza aún en casa, porque los pies están más expuestos a heridas e infecciones.
11. Ten cuidado con los remedios caseros. Autotratarse puede convertir un problema pequeño en uno grande. No cortes los callos o juanetes con navajas de afeitar, tijeras u otros objetos cortantes.
12. En caso de que los pies te duelan de manera persistente, notas cambios de coloración o temperatura, deformidades, adormecimientos, hinchazón, ampollas, úlceras y otras lesiones en la piel, acude con tu médico.
13. Es muy importante que las personas diabéticas o con problemas de circulación vean al médico de inmediato si observan lesiones en sus pies. Aunque no tengan molestias, sus pies deben ser revisados como mínimo cada tres meses por su médico para detectar oportunamente cualquier lesión y así recibir el tratamiento adecuado.

Como ves, son sencillos consejos que nos permitirán tener unos pies más saludables, libres de lesiones y hongos. Pero no estamos exentos de poder contraer una infección, así que ante cualquier signo de alerta, acude a tu médico.

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